La Basílica de San Giorgio Maggiore es una de las iglesias más importantes de Venecia. Fue construida en el Renacimiento tardío, un estilo muy presente en toda su estructura. La basílica destaca sobre todo por su fachada y su campanario, uno de los más altos de toda Venecia. Su entorno hace que la Basílica de San Giorgio Maggiore cobre aun más belleza, pues se sitúa en una isla propia (con el mismo nombre) y es visible desde puntos clave de la ciudad como la Plaza de San Marcos.
Interior San Giorgio Maggiore
La Basílica de San Giorgio Maggiore es uno de esos lugares que hay que visitar sin falta en un viaje a Venecia. Andrea Palladio, su arquitecto, fue capaz de crear una de las maravillas de la ciudad. Su fachada blanca es realmente impresionante. Dentro, la blancura la regala la abundante luz y sus preciosas columnas que iluminan cada rincón y contrastan con un pavimento de tonos más oscuros.
El interior esconde la mano de otros grandes artistas. Uno de ellos, Tintoretto, es una de las grandes figuras del renacimiento veneciano. En la basílica podemos observar no una sino varias pinturas del maestro.
Un campanario con vistas únicas
Para completar el complejo de San Giorgio Maggiore, está su magnífico campanile o torre del campanario. Pese a no ser tan conocido como el Campanile de San Marcos, este nos ofrece una de las mejores vistas de Venecia. Entre otras cosas porque tiene una visión perfecta a la Plaza de San Marcos, a quien la basílica mira directamente. Casi en un bello desafío por ser el campanario más visitado de la ciudad, los dos se miran desafiantes.
El campanario se puede visitar y cuenta con ascensor para facilitar la subida a la cima.
Precios y horarios
La entrada a la basílica es gratuita, pero para subir al campanario hay que pagar 3€.
El horario de visita para ambos se divide en dos periodos.
De mayo a septiembre, abre de 09:30 a 18:00. De octubre a abril, de 09:30 a 16:30.
